Antes de que comenzase el juicio por robo, los dos abogadores defensores acudieron a un cajero. El resguardo del ingreso que hicieron obligó a la Fiscalía a rebajar su petición.
Sus clientes se enfrentaban a 18 meses de cárcel por robar un vino valorado en 14,95 euros. Pero a estos dos abogados de oficio se les ocurrió una particular solución. Defendían a una pareja que acumulaba un amplio historial de sustracciones. Esta vez, se sentaban en el banquillo por llevarse un caldo Marqués de Riscal de un supermercado de Vigo la tarde del 8 de marzo de 2019.
Habían escondido la botella en una mochila y la cajera, que sospechaba de una posible sustracción, les obligó a mostrársela. El varón se negó, forcejearon con la trabajadora y escaparon a toda prisa de la tienda. Los acusados había comentado a sus defensores que no tenían dinero para saldar la deuda.
